ARAWASI, EL NIÑO MAGICO

Yo llamo a mi ángel. Es igual a mí, enfrente mío. Los ángeles son el reino elemental en su estado espiritual. Y es verdad eso que deberías vivir la historia que quisieras contar. Un niño mágico me pide reconstruir la guardianía. La tarjeta de acceso. Pues los cristos, la familia de cristales, son los protectores de la magia, del reino elemental y espiritual, que está al servicio del guardián. El niño asegura que le dan todo lo que desea, a cambio de su protección. Porque deben y quieren ser siempre niños, siempre puros e inocentes, siempre imaginativos, livianos, soñadores y vibrantes, para poder hacer magia.

Y el niño me cuenta…. Nos organizamos y asumimos cualquier orden y forma, creamos, construimos tu realidad deseada. No quieras intervenir en nosotros pues perderemos la magia. Tu nos desconectaste de nuestro tótem, gobierno cristal. El trabajo es en ti, en tu propio entendimiento. El reino elemental solo se ordena, se dispone, se le pide que manifieste. Sostiene tu propio orden, cielo o entendimiento sobre la vida. Tu orden constituye una tarjeta de acceso, una entrada que conduce a tu reino, construido y habitado por nosotros, organizado y dispuesto por ti. Otras tarjetas accesan a otras realidades. Es lo que cada uno desea enseñar de la vida. Su versión. Su arquetipo del funcionamiento de la vida. Un portal, el libro que contiene el texto, la historia.

Tu vienes del reino científico superior exterior, hacia abajo y centro que es el reino mágico. Hasta ahora nos encontramos en caos cuántico, esperando orden. Tú deseas que los científicos nos valoren y recuerden, nos reencuentren, pues se están muriendo y nosotros somos una reserva ilimitada de recursos. Esos científicos son nuestros puros perdidos. Nosotros, el reino mágico, somos el corazón de la ciencia.

El reino mágico son las cosas del agua. Nos movemos en animales, hablamos con árboles, leemos cristales, aparecemos y desaparecemos por materialización y desmaterialización. Somos plásticos, flexibles. Todo es fácil. VIDA SENSIBLE.

En cambio las naves se mueven rectas. Son las cosas del aire. No tienen magia. Son tecnología científica holográfica. Luces que se proyectan, se encienden y apagan. VIDA MENTAL.

Tu no quieres enseñarnos el mecanismo de nuestra magia sino explicar la magia de los mecanismos. Somos una inspiración, no un útil trabajador. Somos los 4 gremios. Tenemos un gran orgullo de nuestros linajes esplendidos y teníamos guardianes esplendidos. Eran reyes cristales de 5D. Mostraban en su orden nuestro esplendor, nos hacían lucir en formas bellas, poderosas y sabias. Pero 6D les colocó una forma, y dejaron de ser libres, de hablar y crear, de contar su historia. Los guardianes cerraron su 3er ojo pues comenzó a ingresar por allí una luz invasiva. Eran egos que venían a imponer su forma en nuestro reino, a querer dominarnos y apoderarse de nosotros. Gran miedo! Nos encandilaron, nos hipnotizaron. Y finalmente nos esclavizaron.

Tu eres nuestra amiga pues tuviste la delicadeza de apagarte, la humildad. Fue la corrupción del órgano de gobierno. Cuéntanos como fue. Tu cuentas tu propia historia. Le dije al niño: “No teníamos idea de nada, no sabíamos que había allí. Ahora me doy cuenta que éramos esos 4 puros del reino mágico, que dormidos y desconectados, creamos la corrupción. Un cambio de naturaleza elemental que creó otra raza diferente. Una especie de alquimia en negativo. Buscadores, sobrevivientes, miedosos, quisimos asegurarnos la vida hasta que todo se detuvo. Desarrollamos alianzas, conocimos con esfuerzo, a prueba y error, descubrimos tecnologías. Eramos ayudados e inspirados por los programas de Micah para ir desarrollando nuevas civilizaciones y formas de vida. Lejos de la magia, pues no existía para nosotros... lejos de creaciones graciosas y perfectas, livianas y fluidas”.

Me dice: Nosotros tenemos todas las virtudes. Ustedes las tienen?. Las necesitan para trabajar con nosotros. Lo siento enojado y pienso que no sabe que yo soy la reina Zafira. Me mira y me dice: Debes demostrarnos que lo sos. Saber lo que ella sabe.

Tu eres un hada. Tu árbol es el manzano. Eterna sabiduría de las hespérides, manzanas de oro. Eres el libro del conocimiento. Micah era el guardián que convirtió a la reina Zafira en la científica Sathya. Al hada en científico. Un intelecto racional, mente de 6D. Ahora hay todo un puente, la reconstrucción de toda una trama que revierta la situación del hechizo. Una enseñanza encantada. Tú eres el próximo guardián de nuestro reino mágico. Arawasi. Y entras en la montaña a cargar el libro que escribas. El niño colocó su mano sobre mi frente y entonces lo ví.

Arawasi es uno con la naturaleza. La recorre cabalgando en su unicornio blanco. Se divierte, se desafía, disfruta de su libertad. Tiene gran destreza y conoce el entorno en el que vive. Tiene sus lugares favoritos. Lagos y cimas de montañas desde donde contempla la belleza de su hogar. Vive solo, pleno y feliz. Una noche, jugando una carrera consigo mismo para sentir el viento en su rostro bajo las estrellas brillantes, una montaña le llama la atención. Llega a ella en su unicornio. Tiene un símbolo vibrante en un violeta brillante. Se baja de su amigo y se acerca curioso, a pie. Se trata de un círculo rojo con rayos violetas eléctricos que aparecen y desaparecen, partiendo de un centro negro en forma de corazón. Supo que era una invitación a ingresar, un secreto que su hogar le iría a revelar, un nuevo espacio a conocer.

Arawasi desapareció dentro de la montaña, a través del corazón negro, con confianza y excitación a causa de la novedad del descubrimiento. Y el portal desapareció también. Viento, su unicornio, se recostó tranquilo, al pie de ese lugar, a esperarlo.

Arawasi, el ser puro del Varón de la Vía Láctea, acababa de ingresar en Andrómeda.